sábado, 14 de enero de 2012

EL SABOR DEL ENCUENTRO (TeenSTAR, primera parte)



Estuve durante la semana recién pasada en la Pontificia Universidad Católica de Chile en un seminario de capacitación para convertirme en monitor de un programa de Afectividad y Sexualidad llamado TeenSTAR, el cual se aplica en diferentes colegios de Chile y el mundo con excelentes resultados. Ayer terminó el curso y me voy con muchos aprendizajes y mucho trabajo.

Como Profesor de Religión, nunca pensé que volvería a estudiar los contenidos que he estudiado durante gran parte de estos días: sistema endocrino, genética, neurología, anatomía, etc. y debo reconocer con gran alegría que me he reencantado con el Milagro de la Vida. Y es que no es otra cosa, no se me ocurre mejor apelativo ante el nacimiento de un ser humano que “milagroso”.

He venido a hacer este curso con Luis, Profesor de Biología, quien conoce de sobra la materia, pero que -me cuenta- se apasiona y se sorprende una y otra vez al ver cómo un espermatozoide lucha por llegar al óvulo, o cómo el ovario libera al ovocito más adecuado para la fecundación…

Dentro de los aprendizajes más importantes que me llevo es que el hombre y la mujer son diferentes desde sus primeras horas de vida en el interior de la mujer. Esa es nuestra riqueza: no es necesario solo buscar puntos comunes para estar en sintonía, sino, justamente, buscar en el otro lo que me falta y que esa persona puede desarrollar en mí.

En esta misma línea recuerdo que vi hace unos días un spot publicitario argentino de una cerveza cuyo slogan es “el sabor del encuentro” que me llamó muchísimo la atención. Al finalizar el comercial hay una frase que finge ser una moraleja: “cuando el machismo y el feminismo se encuentran, nace el igualismo”. Sin profundizarlo suena hasta bonito, pero la verdad es que creo que ninguno de esos “ismos” está bien… ni siquiera el que nace de la suma de los otros dos.

Seguramente estamos de acuerdo en que el machismo es malo. Seguramente estamos de acuerdo en que el feminismo es malo. Cuando dos cosas malas se juntan ¿forman algo bueno?
SI mezclo betarragas (me cargan) con crema espárragos (¡puaj!) ¿Tomarán un buen sabor para mí? Lo dudo. Si a un auto con un eje malo le pongo como chofer a un hombre ebrio ¿se manejará mejor? Imposible.

“Cuando el machismo y el feminismo se encuentran forman el igualismo”, lo que podemos leer como “cuando la corriente que considera que la mujer es inferior se junta con la corriente que cree que el hombre es inferior se crea una corriente que cree que los dos anteriores son igualmente malos”. El hombre y la mujer somos sumamente diferentes y nos entregamos mutuamente lo que el otro necesita. Ahí está la razón por la cual nos encontramos, la razón por la cual es sabroso ese encuentro.

2 comentarios:

  1. Excelente! que bendición que hayas podido hacer ese curso, de seguro será de gran provecho para todos en el colegio! me alegro de todo corazón por las puertas que Dios está abriendo para ti, fijandose en tu fidelidad y trabajo esforzado y sincero por su Reino!.

    Un abrazo y mi oración como siempre!
    Bendiciones!

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  2. Gracias Seba!!! a mí el Señor me sorprende cada día más y me alegra profundamente con sus bendiciones!! un abrazo para ti tambien!!

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