domingo, 12 de abril de 2015

QUE ACTÚE LA GRACIA (y 3era parte)

Tuve rabia. Estaba enojado en misa.
Una vez más, Felipe estaba conversando.
Su actitud era displicente
y contagiaba eso a sus compañeros.
Lo miro fijamente y muy molesto.
Con un gesto le digo que guarde silencio
y él me mira fijo y desafiante.
Con otro gesto le digo que mire hacia adelante.
Él se ríe irónico y mira hacia el frente.
Llega el momento de comulgar
y Felipe no duda en ponerse de pie.
Mi primer pensamiento es “¡Qué caradura!”

Luego pienso en Carlos y en Carolina.
Mi rabia se va esperando una sola cosa:
Que en él actúe la gracia.
Confío que en ellos actúa la gracia.


Confío también, en que la gracia actuó en mí para poder llegar a entender (y escribir) esto.


viernes, 10 de abril de 2015

QUE ACTÚE LA GRACIA (2nda parte)

Las catequistas están preocupadas.
Este grupo de niños es muy desordenado.
Sus papás no se muestran comprometidos con el sacramento
y los niños replican esa actitud.
Carolina, una de las catequistas, ha hablado con los papás,
pero no ha habido cambios.
Ellas tienen duda si merecen el sacramento.
Les cuesta decirlo delante del padre,
pero barajan una drástica opción:

expulsar a algunos de los niños del grupo.

martes, 7 de abril de 2015

QUE ACTÚE LA GRACIA (1era parte)

Carlitos se porta mal en misa.
La Profesora lo regaña.
Viene el momento de la Comunión.
Todos los niños se ponen de pie.
Les encanta esta parte de la eucaristía.
Carlitos se levanta para ir a comulgar.
La miss no lo aprueba.
Le toma el brazo y lo detiene en la fila.
“Has conversado toda la misa
¿Y vas a ir a comulgar?
¿Crees que lo mereces?”
Carlitos le promete.

Ella lo autoriza.

miércoles, 1 de abril de 2015

DUDAS

Junto al Padre Enrique estamos movilizando a los alumnos de 6° a 8° básico (11 a 13 años de edad) a que hagan preguntas sobre la fe, la Iglesia y la religión. En clases les he entregado un papelito para que pregunten sus dudas de manera anónima, de tal forma que el padre pueda responder dichas interrogantes en la homilía de las misas de los miércoles.

Surgen preguntas clásicas como “¿Por qué los sacerdotes no se pueden casar?” o “¿Qué pasa si cometo muchos pecados?”, etc. Pero hay varias que a mí, personalmente, me llaman la atención y me encantan, y que me motivan a seguir educando en la fe a estos muchachos y muchachas. Aquí van:

Si cuando nos morimos nos vamos al cielo y vivimos allá ¿Por qué tenemos que vivir acá antes?

¿Por qué Jesús no fue personalmente a decir que resucitó y mandó a las mujeres que lo fueron a ver?

Si Dios creó todo ¿Por qué está la droga en el mundo?

¿Por qué, en vez de mezclar las lenguas en la Torre de Babel, no impidió que fuera planeada su construcción?

¿Por qué, si somos sus hijos, Dios permite que nos hagamos daño entre nosotros?

¿Por qué pone a los seres humanos en el Paraíso, para luego quitárselo por el resto de la eternidad?

Cuando uno reza ¿Es mejor concentrarse y entender la frase o es mejor decirlo de memoria, pero rezarlo hartas veces?

¿Por qué Dios nos creó?

¿Si la serpiente no hubiese aparecido en el Jardín del Edén seguiríamos viviendo en la ignorancia y no tendríamos nada de lo que tenemos hoy?

¿Por qué Jesús se sacrificó por nosotros? Y ¿Qué consiguió con resucitar?

¿Es un pecado dudar de la existencia de Dios?

¿María siempre quiso ser mamá de Jesús?

¿Cómo no se pierde la fe y se mantiene en todo momento?

¿Cómo puedo hacer para estar más cercana a Dios si yo rezo todos los días, pido, doy gracias y pido perdón?