domingo, 23 de septiembre de 2012

CO-CREADORES ¿CO-DESTRUCTORES?

Recuerdo de las clases de Trinidad que nos decían que ésta tiene dos procesiones, es decir, que dos personas de la Santísima Trinidad provienen de otra(s): El Hijo proviene del Padre; y el Espíritu Santo proviene del amor entre el Padre y el Hijo.

Si el Padre y el Hijo crean o provocan el Amor, y si hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios, no es tan difícil entender que nosotros también creamos, es decir, somos co-creadores, vamos co-construyendo este mundo mediante la vocación que Dios nos regala a cada uno.
Por lo tanto nosotros también creamos o provocamos amor ¿verdad? No ese Amor (con mayúscula) que procede del Padre y del Hijo, sino el amor de padre, de hijo, de hermano, de pareja... Con un gesto pequeño, una mirada, una sonrisa, con alguna caricia sobre una herida o quemadura, o unas flores enviadas a la puerta de la mujer amada, vamos creando el amor en la otra persona, y vamos creando una relación de amor de menos a más. ¡Qué hermoso es ser parte de eso! ¡Qué mejor regalo que crear y cultivar el amor! Y no podía no ser hermoso si es un don divino realmente: somos capaces de crear el amor.

Me pregunto ahora ¿Dios es capaz de destruir el Amor? ¿Dios haría eso alguna vez? La pregunta de fondo de todo esto (y a la cual aún no encuentro respuesta y ansío descubrirla pronto) es ¿podemos nosotros destruir el amor? ¿Se acaba el amor? ¿adonde va?

Hoy todo apunta a que sí podemos destruir el amor, con un "no", con un "no puedo", con un "adiós"...
:(
ojalá me equivoque

jueves, 20 de septiembre de 2012

Hace mucho tiempo que no escribo, y es que en realidad no he tenido el tiempo para plasmar en el blog las reflexiones que hago a diario sobre la fe, pero no se preocupen, que no he dejado de hacerlas. Aunque ¿de qué valen si no las comparto?

Otra razón por la que no he escrito mucho, es porque me he preocupado de leer a quienes más saben, como el que cito a continuación. Aquí les dejo el texto completo, que es bien breve:

"Al llegar a Cafarnaún, Jesús les pregunta: «¿De qué discutíais por el camino?». Los discípulos se callan. Están avergonzados. Marcos nos dice que, por el camino, habían discutido quién era el más importante. Ciertamente, es vergonzoso ver al Crucificado acompañado de cerca por un grupo de discípulos llenos de estúpidas ambiciones. ¿De qué discutimos hoy en la Iglesia mientras decimos seguir a Jesús?"

José Antonio Pagola

lunes, 3 de septiembre de 2012

CUANDO MUERA

Cuando muera me gustaría que todos los que vayan a mi funeral lleven un globo que me ayude a llegar a lo alto del Cielo, como un signo de que los demás nos llevan a Dios.