Fue hermoso ser recibido esa fría noche santiaguina con estas palabras sobre mi colchón:
"Decir tu nombre, María, es decir que toda muerte puede ser también Su Pascua.
Decir tu nombre, María, es decirte Toda Suya, Causa de Nuestra Alegría".
(Pedro Casaldaliga)
No puedo evitar que ante el texto tan bello que nos presentas, me asalten otras palabras de alguien que nos dió ejemplo de ese amor a María:
ResponderEliminar"TOTUS TUUS" (Juan Pablo II)